
El papa Francisco, un activista de la lucha contra el cambio climático

Durante su pontificado, Francisco trabajó incansablemente para promover la lucha contra el cambio climático, que incluyó en muchos de sus discursos y al que incluso dedicó una encícilica.
Pocas horas después de su fallecimiento este lunes a los 88 años, el secretario ejecutivo de la ONU Clima, Simon Stiell, le recordó como "un inquebrantable defensor de la acción por el clima".
"Gracias a su incansable defensa, el papa Francisco nos recordó que no puede haber prosperidad compartida hasta que no hagamos las paces con la naturaleza y protejamos a los más vulnerables", declaró Stiell en un comunicado.
En el mismo sentido, el presidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva, que será el anfitrión a finales de año de la gran cumbre del clima de la ONU, destacó que el pontífice argentino impulsó con "valentía y empatía" la causa climática.
El Vaticano ya había tratado la cuestión del medio ambiente y el predecesor de Francisco, el alemán Benedicto XVI, fue incluso apodado "el Papa verde".
Pero fue el argentino quien publicó en 2015 la primera encíclica sobre la cuestión de cómo proteger el planeta, nuestra "casa común".
Según el experto en catolicismo Charles Mercier, la enciclica 'Laudato si' "finalizó el proyecto de su predecesor" con "un enfoque diferente" porque incluye referencias a creencias amazónicas y elementos no occidentales relacionados con la naturaleza.
- "Brújula moral" -
"No solo fue el papa del clima, sino de la Amazonía, de los bosques, de los océanos. Pero sobre todo un papa de esperanza", dijo a AFP Oscar Soria, un activista argentino, veterano de las negociaciones climáticas.
Incluso antes de ser elegido papa, Jorge Bergoglio llevó estos temas a la Conferencia General del Episcopado Latinoamericano y del Caribe que se celebró en 2007 en la ciudad brasileña de Aparecida.
"Siempre estuvo del lado de los más pobres y de las poblaciones indígenas", recuerda el activista.
En 2015, pocos meses después de "Laudato si", se logró un avance significativo durante la COP21 con el Acuerdo de París, cuyo objetivo es mantener el aumento de la temperatura por debajo de los 2 °C. "Ha sido una brújula moral en las negociaciones climáticas desde 2015", dice Oscar Soria, con la voz entrecortada.
Según Laurence Tubiana, una de las arquitectas del Acuerdo de París, "'Laudato si' fue un texto fundacional del compromiso cristiano con la acción climática, que inspiró y marcó a una nueva generación".
El texto, basado en la investigación científica sobre el clima, afirmaba claramente que la humanidad es responsable del calentamiento global y advertía contra el rápido cambio y la degradación que han llevado al mundo al borde del "punto de ruptura".
La encíclica desencadenó un debate a nivel mundial, sin precedentes para un texto religioso, incluyendo comentarios en revistas científicas.
El mensaje de Francisco también tenía una fuerte connotación moral, denunciando la responsabilidad del consumismo, el individualismo y la búsqueda del crecimiento económico a expensas del planeta.
En 2023, ocho años después de la encíclica, Francisco volvió a tratar la cuestión en la exhortación apostólica "Laudate Deum", una recomendación dirigida a los fieles, publicada semanas antes de la COP28 de Dubái.
El texto pedía una transición energética "vinculante", deplorando respuestas insuficientes.
Su salud le impidió viajar a Dubái pero, en septiembre de 2024, desde Indonesia, el papa seguía advirtiendo que "la crisis ambiental que se ha convertido en un obstáculo para el crecimiento y la convivencia de los pueblos".
U.Andre--PS