
Juez de EEUU autoriza deportación de líder estudiantil propalestino

Un juez estadounidense dictaminó el viernes que Mahmoud Khalil, un líder de protestas estudiantiles propalestinas detenido por el gobierno de Donald Trump, puede ser deportado, informó su abogado.
Khalil, estudiante de la Universidad de Columbia y uno de los rostros más destacados del movimiento de protesta que estalló el año pasado contra la guerra de Israel en Gaza, fue detenido y trasladado a Luisiana en marzo. Tiene residencia legal permanente y está casado con una ciudadana estadounidense.
Trump acusa a este movimiento estudiantil de antisemitismo, mientras que defensores de las libertades fundamentales consideran que su detención y la de otros estudiantes atentan contra la libertad de expresión.
El juez adjunto de inmigración Jamee Comans afirmó que el gobierno había cumplido con su obligación de demostrar que tenía motivos para deportar a Khalil, según una declaración de su abogado.
El gobierno alega que sus actividades de protesta representan una amenaza para la seguridad nacional.
"Hoy vimos cómo se materializaban nuestros peores temores: Mahmoud fue sometido a una farsa del debido proceso, a una flagrante violación de su derecho a una audiencia justa y a la utilización de la ley de inmigración como arma para reprimir la disidencia. Esto no ha terminado, y nuestra lucha continúa", dijo uno de sus defensores, Marc van der Hout, en el comunicado.
La deportación de Khalil aún no se programó, y el juez dio a sus abogados hasta el 23 de abril para solicitar una exención, añadió el comunicado.
En su declaración ante el tribunal, Khalil afirmó: "Quisiera citar lo que usted dijo la última vez: que no hay nada más importante para este tribunal que el derecho al debido proceso y la equidad fundamental. Claramente, lo que presenciamos hoy no cumplió con ninguno de estos principios".
- Democracia "en crisis" -
El juez Comans había ordenado al gobierno que explicara detalladamente su caso contra Khalil.
En una carta dirigida al tribunal, el secretario de Estado estadounidense, Marco Rubio, insistió en que el activismo de Khalil podría perjudicar la política exterior de Washington.
Sin embargo, se negó a argumentar formalmente que el estudiante palestino nacido en Argelia estuviera alineado con Hamás, como informaron funcionarios a la prensa.
La carta, sin fecha, se refería en cambio a la "participación y el papel" de Khalil en presuntas "protestas antisemitas y actividades disruptivas que fomentan un entorno hostil para los estudiantes judíos en Estados Unidos". No hacía referencia a ningún presunto delito.
El arresto de Khalil el mes pasado desató una guerra judicial. Desde entonces hubo más detenciones y se le revocó el visado a otros estudiantes que participaron en las protestas para denunciar la situación en Gaza.
Decenas de abogados de alto perfil se unieron al caso del lado de Khalil, presentando el procedimiento como una prueba para la libertad de expresión y los límites del poder de Trump.
"Las acciones de la administración Trump contra las universidades, sus investigadores y sus estudiantes no tienen precedentes recientes en la historia de Estados Unidos", declaró el profesor de derecho de la Universidad de Columbia, David Pozen, en un evento de formación el viernes. "La democracia estadounidense está en crisis".
J.Simon--PS