
Los republicanos del Congreso, en apuros para financiar la agenda de Trump

Los congresistas republicanos estadounidenses intentarán este jueves aprobar una resolución presupuestaria para avanzar con la agenda del presidente Donald Trump.
La resolución no es un presupuesto propiamente dicho, sino una hoja de ruta sobre los niveles de gasto futuros para el Estado federal. Tiene como objetivo dar a las comisiones parlamentarias instrucciones y los montos con los cuales podrán moldear las partidas presupuestarias.
La oposición demócrata se opone a la resolución, al igual que algunos republicanos.
El presidente republicano de la Cámara de Representantes, Mike Johnson, intentó el miércoles votar la resolución, ya adoptada por el Senado y que cuenta con el apoyo de la Casa Blanca.
Pero después de haber retrasado el proceso varias horas tuvo que ceder, rindiéndose a la evidencia de que demasiados miembros de su partido tenían previsto votar en contra.
Fervientes partidarios de la ortodoxia presupuestaria y, por lo tanto, de una reducción del déficit, estos congresistas rebeldes rechazan la versión actual porque prevé 4.000 millones de dólares en recortes en los gastos federales, cuando ellos desearían acercarse a los 1,5 billones de dólares.
En rueda de prensa, Johnson se mostró optimista este jueves.
"Creo que tenemos los votos necesarios para finalmente adoptar la resolución presupuestaria para que podamos avanzar en el programa muy importante del presidente Trump", declaró. Citó "la seguridad fronteriza", "la dominación energética estadounidense", y "por supuesto, también, los créditos fiscales".
Johnson sabe que está en la cuerda floja: no puede permitirse perder más de tres votos en su bando.
Porque los demócratas se oponen en bloque a este texto que, según ellos, abre el camino a un desmantelamiento sistemático de la seguridad social, que en Estados Unidos otorga pensiones y algunas ayudas públicas, y del Medicaid, el seguro de salud de muchos estadounidenses de ingresos modestos.
Numerosos expertos presupuestarios advierten que para reducir los gastos del Estado federal en 1,5 billones de dólares habrá que realizar recortes importantes en estos programas.
D.Gautier--PS