
Pogacar es "quizá el mejor de todos los tiempos", considera Greg LeMond

Greg LeMond, último vencedor de un Tour de Francia que participó en la París-Roubaix un año después, en 1991, se mostró convencido, en una entrevista a la AFP, de que Tadej Pogacar puede ganar la 'Reina de las clásicas' en su primera participación.
"Ya es quizá el mejor corredor de todos los tiempos", estima el estadounidense, tres veces ganador del Tour (1986, 1989, 1990), que relata su amor por las clásicas, y especialmente por 'El infierno del norte', "una carrera mágica".
PREGUNTA: Usted es el último en haber conquistado la París-Roubaix en calidad de vigente campeón del Tour de Francia. Fue en 1991. ¿Cómo explica esa larga espera?
RESPUESTA: "Estoy sorprendido. ¿Hace cuánto, 34 años? Eso debería ser… ilegal (sonríe) ¿Por qué privarse de esa experiencia? Es una carrera mágica, la mejor. A Hinault no le gustaba la París-Roubaix, pero vino y la ganó. A mí sí me gustaba. El Tour de Francia sigue siendo mi carrera favorita pero París-Roubaix va justo detrás. Soñaba con ganarla".
P: Cuarto en 1985, noveno en 1992, usted no estuvo tan lejos.
R: "Yo estaba bien en 1986 también, pero tuve un problema mecánico (terminó 55º). Luego de mi accidente de caza (en 1987) no volví a recuperar mi nivel en las clásicas. En 1992 iba fuerte pero estaba para ayudar a Gilbert Duclos-Lassalle a ganar su primera París-Roubaix, porque sin él no hubiese ganado el Tour de Francia en 1990."
P: ¿Puede Pogacar ganar el domingo?
R: "¡Por supuesto! Su único punto débil es quizá su equipo. París-Roubaix es un poco una lotería, lo que por otro lado la hace hermosa. Hay caídas, problemas mecánicos y él podría verse aislado. También le falta experiencia en esta carrera. Por ello yo situaría a Van der Poel ligeramente favorito".
P: ¿No es demasiado ligero?
R: "Creo que pesa lo mismo que Hinault en la época (66 kg) y apenas dos kilos más que yo. Belgas y neerlandeses insisten mucho en eso pero para mí Pogacar tiene el perfil adecuado para las clásicas. Un corredor como Ganna es muy poderoso pero necesita también un gran gasto de energía".
P: ¿Pero dónde puede Pogacar marcar la diferencia?
R: "Esa es la clave del problema. Roubaix es menos selectiva que el Tour de Flandes. Pero se decía lo mismo de Bernard Hinault. Cuando se tiene su talento, su determinación y sus cualidades no hay ninguna razón para que no lo logre. Él es tan fuerte, quizá es ya el mejor corredor de todos los tiempos".
P: ¿Mejor que Merckx?
R: "Es imposible comparar las generaciones. Pero sería absurdo pensar que sólo hubiera un Eddy Merckx. Él estaba bendecido a nivel genético, yo también. Hinault también era excepcional. Al contrario que Merckx, él no era el líder único en todas las carreras, ayudaba a otros compañeros, y creo que eso le costó no pocas victorias. Pero Pogacar, sólo hay uno como él entre un millón. Domina un pelotón que nunca antes había sido tan competitivo. Y observen cómo gana: en solitario ante equipos superorganizados.
P: ¿Hasta dónde puede llegar?
R: "Sólo tiene 26 años, es una locura. Tiene aún varios Tours de Francia en sus piernas, aunque no hay que olvidar a Vingegaard. En el Tour su nivel es muy parejo".
P: Algunos ponen en duda su espectacular rendimiento...
R: "Ha habido muchos interrogantes sobre cómo suben tan rápido esos corredores. He hecho algunos cálculos con Vingegaard y Pogacar. Creo que son factibles, porque en primer lugar pasan tiempo en altura y porque de media pesan 3 o 4 kilos menos que antes. Vingegard es de mi altura, y creo que pesa 10 kilos menos. Si yo pesase 10 kilos menos subiría igual de rápido. Me tranquiliza que han sido muy buenos desde jóvenes. En el pasado vimos a corredores alcanzar los 30 años antes de rendir en el Tour, y eso era sospechoso.
D.Petit--PS